31 marzo 2015

ENTREVISTA A JESÚS BARRIO VALENCIA

Hoy tengo el gusto de compartiros una entrevista. Se trata de una ocasión muy especial, ya que pocos profesores hay en activo con tanta experiencia como éste. Fue profesor de varios centros educativos, no solo en Galicia sino también en Portugal, donde ejerció su profesión durante 6 años, dejando un buen recuerdo en todos sus estudiantes. Se trata de, Jesús Barrio Valencia (Suso):

¡Hola Suso! Llevas ya muchos años siendo docente de Educación Física, dando clase a cientos de estudiantes, con diferentes leyes educativas, en diferentes centros educativos, en diferentes países incluso; por lo que me atrevo a decir que eres uno de los profesores más experimentados que conozco en activo. Por este motivo, y porque tienes bastante culpa en que yo sea lo que soy, te voy a hacer ahora algunas preguntas relativas a nuestro campo de interés que es la Educación Física, no sin antes darte las gracias por tomarte el tiempo de responderlas.


  • Yo soy maestro de casualidad. Estudié magisterio porque era lo que podía estudiar en Ourense y no tenía que gastar dinero de mis padres en ir a estudiar una carrera fuera. Además cuando me llegó el momento de decidir no tenia nada claro nada. Estudié toda la carrera (3 años) pensando en que después haría otro estudio. Para colmo, en el tercer curso que era todo de prácticas en un colegio, a mí me tocó en el colegio de Guizamonde. El director era del opus y no tardé en tener una discusión que yo creí banal con el cura que daba religión y el director me “castigó” mandándome a 3º. Allí el maestro daba "ostias" a diestro y siniestro, por cualquier cosa. Aquella clase era un caos terrible. Además, para más inri, se tomaba muchas tardes libres para ir a entierros y me tocaba quedarme yo solo en la clase sin saber muy bien qué hacer y teniendo que imponerme a "ostias" que era la rutina de la clase… En el aire planeaba la amenaza de que si te suspendían las prácticas no tenías el título y el  director del colegio tenía que informar. Fue un año interminable: lo pasé fatal y acabé prometiéndome que nunca más volvería a pisar un aula (junio, 1973). En ese verano se supo que iban a convocar oposiciones a magisterio. Hacía varios años que no se convocaban y los que acabábamos de terminar los estudios teníamos ventaja porque teníamos todo fresquito y habíamos dado literalmente todos los temas del programa oficial: no tuve que estudiar nada nuevo para la oposición. En julio me fui a la mili hasta diciembre. Desde enero me dediqué solo a estudiar además de ir a clases para preparar las oposiciones que serían en julio. Las aprobé por ciencias sociales sacando un buen número (el 7 de hombres, que íbamos por separado de las mujeres). Entonces me fui a terminar de hacer la mili (de diciembre del 1974 a abril de 1976). La hice en Barcelona. Me incorporé después a un colegio en la costa gallega después de haber firmado fidelidad a los principios del movimiento nacional. Allí daba clase de sociales y lengua. En este tiempo la EF era tenida por instrucción paramilitar y, en general cosa de fachas.

¿Qué te motivó a ser profesor de Educación Física (EF)?

Varias cosas:
  • Cuando en Septiembre de 1977 me incorporé a un colegio en el interior de Ourense, no se daba clase de EF en aquel colegio porque nadie quería, por motivos diferentes: el colegio no tenía instalaciones específicas; el espacio abierto lo era de todo: el monte. En este tiempo para poder especializarse en EF había dos caminos: hacer INEF (yo no podía porque vivía de mi trabajo como maestro y solo había INEF en Madrid) o solicitar un curso específico en la “Escuela de mandos José Antonio” Era una escuela de formación de cuadros de Falange que también estaba en Madrid. Aunque haciendo las gestiones oportunas hubiera podido ir incluso manteniendo el sueldo y demás, por motivos ideológicos era imposible. Significaba que no tendría tutoría de cursos “bajos”. Empecé dando EF en EGB. En ese plan solo se contemplaba la EF como materia diferenciada impartida por un especialista en 2ª etapa, es decir, en 6º, 7º y 8º. Me horrorizaba la posibilidad de tener que dar clases en la 1ª etapa (de 1º a 5º).  La EF me defendía de esa posibilidad.
  • La EF tenía el aliciente de que a los niños les encantaba, y las salidas a competir con otros colegios en fútbol y campo a través, me gustaban mas que a un niño un caramelo. La situación en general de la EF en ese momento era tan mala que a nada que trabajaras un poco ya destacabas con relativa facilidad en relación a equipos de otros centros más grandes, lo que suponía una machada muy placentera y de cara al alumnado y a los padres el colegio se revalorizaba notablemente.
  • Tuve que estudiar bastante por mi cuenta y acudiendo a cursillos (aunque desde el interior de Ourense era bastante complicado) hasta que en el año 1986 pude hacer en Lugo (estando en otro colegio) el curso de especialización que duró 8 meses y estuvo muy bien.

¿Qué es para ti la EF?
  • Una forma honrada y muy agradable de ganarme la vida.
  • La ocasión de transmitir al alumnado unos valores vitales que me parecen imprescindibles y difíciles de transmitir por otros medios.
  • La ocasión de participar en actividades intercentros y otras extracurriculares.
¿Cuál era la situación de la EF cuando empezaste?

  • Esto ya está contestado anteriormente mas o menos.

A lo largo de tu vida profesional, ¿tuviste que defender los beneficios de la EF en alguna ocasión? ¿Cómo fue?
  • Creo que nunca he entrado al trapo de discutir con compañeros y/o personal de la administración sobre la conveniencia o no de la EF. Estoy firmemente convencido de que debería haber tres sesiones semanales en la enseñanza primaria y secundaria, que habría que eliminar las religiones de los colegios y algunas otras valoraciones que no vienen a cuento. Donde encontré más reticencias fue a la hora de programar actividades que incluían a alumnado de varios cursos o salidas del colegio ya que “rompen” la marcha ordinaria de las clases. Por parte del alumnado y de las familias la reticencia más común se refiere a la necesidad de cambiar cuando menos el calzado para la clase de EF y eso no lo discuto: lo explico y lo impongo. Tampoco es muy bien comprendido el que algún alumno suspenda la asignatura de EF. Suele ser bien comprendido cuando es por motivos disciplinarios, no tanto cuando es por motivos curriculares.

¿Qué dirías a los jóvenes que están estudiando ahora la carrera y que piensan en ser profesores de EF?

  • Les animaría a estudiar mucho, todo lo que puedan, y que busquen la compensación al trabajo en el propio trabajo, porque más allá no hay gran cosa que merezca la pena. Los aplausos o las críticas del alumnado, las familias, los compañeros o la administración rara vez obedecen a motivos de carácter técnico. Es muy importante contrastar el trabajo con el de otros colegas. El trabajo en equipo es muy gratificante cuando se comparten los objetivos y hay respeto a las diferencias. No perder de vista que la clase va dirigida al alumnado, nunca a uno mismo. No es difícil lesionarse tratando de “ayudar” en cualquier tipo de actividad. Hay que evitar esto por todos los medios y tratar de mantener la cabeza fría.

¿Y a los que ya son profesores, pero aún tienen por delante varios años de docencia?
  • No perder de vista que la clase va dirigida al alumnado, nunca a uno mismo. No es difícil lesionarse tratando de “ayudar” en cualquier tipo de actividad. Hay que evitar esto por todos los medios y tratar de mantener la cabeza fría.

Dado que tienes experiencia en instituciones educativas de diferentes características, ¿qué has notado como factor común entre todas ellas en cuanto a la actividad física de los estudiantes? ¿Y factor diferencial?
  • En todas partes y siempre, el alumnado en mayor o menor grado acude a la clase EF con muchísima ilusión y una motivación intrínseca. En ese sentido somos la envidia de todos los compañeros, porque uno de los aspectos más complicados de la docencia es conseguir motivar al alumnado.
  • Como factor diferencial (no se si esto responde propiamente a esa calificación) señalar que los centros en los que mejor vive el alumnado es en los centros grandes y con todos los niveles de la enseñanza. Por ejemplo en Portugal el alumnado salía del centro a la universidad después de haber entrado en E. Infantil, es decir, de los 3 a los 17 años. Se vive en un  microcosmos en el que cada uno tiene su sitio y su estatus y bastantes posibilidades de operar cambios. Cuanto menos alumnado hay, más difícil es la trasmisión de valores (ocultos) y la vida social en el centro es muchísimo más pobre.

Cada gobierno nuevo, genera una ley educativa nueva, lo cual sabemos que es muy  perjudicial para la estabilidad del sistema educativo, y en última instancia, para los estudiantes y cuerpo docente, ¿qué propondrías a grandes rasgos en lo que incumbe a la EF? Es decir, ¿qué crees que se debe priorizar para lograr esa estabilidad en el sistema educativo, hablando específicamente de la EF?
  • A pesar de los cambios legislativos que he vivido, en EF no ha habido grandes cambios a nivel de currículum. De todas formas hay que incluir tres sesiones semanales en todos los niveles educativos y dotar a los colegios del material necesario y de los espacios adecuados que permitan que dos cursos tengan clase a la misma hora en las mismas condiciones y sin interferencias. Es vital la formación inicial y permanente del profesorado así como la revisión del número de horas semanales de docencia que no debería superar las 18.

Por último, ¿qué dirías a las familias que están preocupadas por el estado de salud de su hijos/as para revertir el sedentarismo?
  • Los niños deben educarse de pie, es decir, en actividad física. Solo se puede controlar la alimentación a los niños activos que realizan actividades físicas organizadas o espontáneas a diario.

De nuevo muchas gracias por tu tiempo y tus consejos, no solo en la entrevista sino a lo largo de 33 años, espero que sigas siendo un lector más del blog y sigas haciéndome críticas constructivas.

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