28 agosto 2014

FRACTURAS DE FATIGA O ESTRÉS

Siguiendo con nuestros amigos estructurales, los huesos, propongo ahora una reseña sobre las fracturas de estrés, que casi todos hemos visto en alguna ocasión, sea por tv o con compañeros deportistas. Son quizá una de las fracturas más raras que se pueden observar, pero no por ello menos preocupantes. ¡Vamos al grano!
            “Los héroes olímpicos son aquellos que no malgastan sus fuerzas en un entrenamiento precoz y excesivo”.         (Aristóteles, 384-322 a.C.)

            “Una fractura de fatiga es la que aparece cuando se aplican esfuerzos excesivos a un hueso que posee una resistencia elástica normal”. (Pentecost, Jama, 1964).

            “Son fracturas que aparecen sobre un hueso normal, por el efecto de la suma de esfuerzos, que aisladamente no producirían daño alguno”.  (Delee, 1983).

17 agosto 2014

TEJIDO ÓSEO. ¿CÓMO LE AFECTA EL ENVEJECIMIENTO? ¿Y EL EJERCICIO?

Tras las últimas publicaciones, más de opinión que técnicas, quiero volver con esta reseña sobre el comportamiento del tejido óseo, tanto con el envejecimiento como con el ejercicio; a la tónica principal de las publicaciones de este blog, que como sabrán os lectores, es técnica.
Como siempre, procuraré ser lo más práctico posible para que el que lo desee, pueda aplicar lo explicado en la publicación, a su vida.

www.huelva24.com

PROPIEDADES MECÁNICAS DE LOS 2 TIPOS DE TEJIDO ÓSEO

Las propiedades mecánicas de los dos tipos de tejido óseo son diferentes:
  • Hueso cortical: es más rígido que el esponjoso y puede resistir un mayor estrés (fuerza por unidad de superficie) pero una menor deformación antes de fracturarse. In vitro, el hueso esponjoso no se fractura hasta alcanzar una tensión de un 75%, pero el hueso cortical lo hace con tensiones de alrededor de un 2 %.
  • Por otra parte, debido a su estructura porosa, el hueso esponjoso tiene una mayor capacidad de almacenamiento de energía antes de fracturarse y por lo tanto, una mayor tendencia a sufrir fracturas con minutas (dos tipos de fracturas: de alta y de baja energía)

Además, dado que la estructura del hueso es muy diferente según lo consideremos en un plano u otro, su comportamiento mecánico también va  a variar sustancialmente según lo carguemos siguiendo un eje u otro. Esta característica mecánica se conoce con el nombre de anisotropía. De aquí se deriva uno de los grandes problemas que existen a la hora de analizar el comportamiento del hueso osteoporótico frente al hueso “normal”.